martes, 24 de junio de 2008

Confesión de errores

Nuestro corazón se va abriendo
y sentimos esa energía,
como el capullo de una flor,
que nos invade nuestras vidas.

Salimos al encuentro
de nuestras visiones
sobre aquellos momentos
que fueron ocasiones.

Conversamos y se nos fue
esa presente timidez
que nos hacía parecer
que nos iba a enmudecer.

Y contamos historias
ajenas y nuestras,
y no me arrepentí
de irme ante ti.

Dejarte solo con
tu profesión
aquella oportunidad
que te conocí.

A este romance no
lo supimos descubrir
porque no sentía nada
hasta esa vez que te vi

y charlamos de todo,
menos de nuestro amor,
por eso esto ya pasó.

 De los Ángeles

No hay comentarios: